Cuando famosos se vuelven editores

Mañana 7 de febrero, un ícono de la moda a nivel mundial, el modista Karl Lagerfield se convertirá por un día en editor en jefe a nivel mundial de uno de los medios de distribución gratuita más leídos: METRO.

Famoso por llevar las casas de moda como Chanel y Fendi, Lagerfield además de elegir las noticias que serán publicadas por Metro, contribuirá con bocetos e ilustraciones inéditas y dará su opinión sobre las noticias del día que haya seleccionado.

Esta no es la primera vez que algún famoso se convierte en “editor por un día”. En abril del año pasado, la controvertida Lady Gaga también fue invitada por METRO para ser su editora. Dicha colaboración estuvo acompañada de un concurso abierto al público para ganar el puesto de “asistente editorial” de la reconocida cantante. Tanto el concurso, como su colaboración resultó todo un éxito para el periódico, que a nivel mundial cuenta con más de 25 millones de lectores. En España ha hecho algo parecido, pero con empresarios, el periódico gratuito Negocio.

¿Será esta una nueva tendencia? Invitar a personalidades del mundo artístico y celebridades de moda a realizar las funciones de un editor en jefe mundial, el puesto más alto que cualquier comunicador casi mataría por tener. ¿O será una estrategia comercial para vender mayor número de periódicos? Lo que sí es claro que el círculo de «¿qué fue primero, el huevo o la gallina?», que en este caso es el nombre, o el puesto, está cada vez más confuso. Antes teníamos a editoras que se convertían en famosas porque basaban personajes de películas en ellas, y hoy a ganadoras de Grammys y diseñadores de renombre al frente de los medios de comunicación, aunque sólo por un día.

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