El diario El País publica un extenso resumen del estudio realizado por mi Firma, Estudio de Comunicación (me pongo una medallita, que también colaboré), denominado “Las marcas de consumo en la Web 2.0”. El análisis abarca algunas de las principales marcas multinacionales establecidas en España, Argentina, Portugal, Chile y México, que son los estados en los que nuestro Despacho tiene presencia.
Hemos sacado muchas conclusiones importantes, pero hay una genérica que también ha destacado el periódico: “La mayoría de las compañías se han dado cuenta de la importancia de participar en la sociedad de la conversación, pero sólo unas pocas ponen en marcha estrategias de comunicación en los medios sociales dirigidas a los consumidores de cada país”. Que no nos hemos puesto aún del todo “las pilas”, vaya; aunque también nos dice el estudio que las grandes compañías dedican cada vez más recursos a la Web 2.0. Es el buen camino.
No quiero abrumar con cifras, porcentajes y conclusiones, cuya lectura resulta más enriquecedora si se mira el estudio o se lee el resumen publicado por El País. Pero si reflexionar sobre un aspecto que queda latente: las marcas han diseñado su estrategia desde el emisor y no desde el receptor. Es decir, todavía no se han puesto en la piel de un mexicano, o un portugues o un español y han diseñado su estrategia online pensando en ellos, en sus necesidades particulares.
Algunos ejemplos como el de LVMH son claros. La firma francesa no tiene ni páginas en español. Tal vez, cree que es una marca tan importante que no lo necesita. Yo creo que se equivoca.