Parece que la comunicación interna es, también, una cuestión de género, según un estudio realizado por investigadores de la Universidad Carlos III de Madrid en el que se analizan las diferencias de género en el estilo de liderazgo. Los datos proceden de la Workplace Employment Relationships Survey: una encuesta representativa de los lugares de trabajo del Reino Unido hecha en equipos de dirección con distinta presencia de mujeres. Y parecen corroborar aquello de que los jefes (ellos) son de Venus y las jefas (ellas) de Marte… Al menos, en lo que a comunicación interna y gestión de equipos se refiere.
En el estudio se concluye que en los lugares de trabajo donde hay más mujeres en cargos directivos se establecen cauces de comunicación más interpersonal, se hace un seguimiento más individualizado del empleado y se toman decisiones más democráticas. Según este estudio, si una empresa quiere que haya mayor contacto entre dirección y empleados, sería más fácil lograrlo si en los altos cargos predomina la presencia femenina… Aunque para mí no todo es cuestión de cuotas o de sexos, porque el buen directivo debe comunicar bien, generar buen rollo y orgullo de pertenencia. Sea hombre, mujer o viceversa.
Por Sonia Díaz, directora.