Digamos que usted representa a una empresa que se encuentra en la disyuntiva de comenzar a estar más presente en Internet. Ya no sólo con su página web de contenido fijo, salvo por la sección donde publican las noticias que dan cuenta de los hitos de la actividad y la sección de ‘Contacta’, sino con algo más. Pero, ¿qué más?
Ahí es donde pregunta, indaga y busca quién puede asesorarle mejor. Ciertamente, su actividad no es equiparable a la de Coca-Cola y es posible que su objetivo diste mucho de lograr cientos de miles de ‘likes’ en su Grupo de Facebook o no le importe si el vídeo promocional del último producto lanzado, aunque bueno, no lograr clasificarse como Case Study por su grado de viralidad. Pero le importa la opinión de sus empleados, de sus clientes y quiere ofrecer un mejor servicio, potenciar su área comercial o contar con aún más eficiente departamento de atención al cliente.
El salto cualitativo que dista entre la web estática a contar con una Identidad Corporativa 2.0 creíble, consolidad y efectiva, es enorme. Así que antes de saltar, permítame sugerirle desde aquí una idea: construya un puente.
Para el puente deberá asentar las bases y establecer pilares mediante un trabajo de escucha. Los primeros tramos del proyecto vendrán con el siguiente trabajo de análisis, planificación y estrategia. El mismo sentido común y conocimiento que aplica a su estrategia de negocio, de relaciones públicas y de comunicación debe regir su presencia y actuación en las redes sociales y medios online. No crea que por ser un entorno relativamente nuevo para usted, basado en herramientas y soportes donde lo importante es la opinión “del otro” la labor de definir una estrategia es distinta. Requiere, como hasta ahora, preparación, profesionalidad y, sobre todo, experiencia.
Toda vez que defina su “Yo digital”, deberá establecer un diálogo, fluido y sincero con sus públicos objetivo. Para ello, no lo dude, deberá planificar acciones multicanal que le permitan adecuarse a las necesidades, gustos y perfiles de empleados, clientes, socios, consumidores o líderes de opinión. Es en esta tercera fase donde se produce el encuentro.
Por Támar Salazar, consultora sénior.
@TamarSalazar