Si todos los indicadores macroeconómicos apuntan al buen momento de la economía Española, este hecho no parece regir en el mundo editorial de nuestro país. Y es que la crisis se acentúa cada vez más entre los grandes grupos periodísticos que ven como año a año empeoran sus cifras de negocio.
Según una información aparecida en Dircomconfidencial, Vocento, Prisa y Unidad Editorial, tres de los grandes grupos españoles, ingresaron durante los nueve primeros meses del año 56 millones de euros menos que en el ejercicio anterior. ¿Las causas? una fuerte caída en ingresos por publicidad y un alarmante descenso en la circulación de los diarios.
Cada día parece más cercano el augurio que realizó Juan Luis Cebrián en el que vaticinaba la desaparición de los diarios escritos a medio plazo. Y es que el mercado de la prensa escrita está desapareciendo. Las nuevas generaciones, nativas digitales, desdeñan al soporte papel y no entienden la fascinación que sentimos por los medios escritos los que hemos crecido con el olor de tinta recién impresa en las manos.
Las consecuencias no son fáciles de dilucidar. La paulatina desaparición de los diarios y revistas no sólo afectará a un gran número de personas que desgraciadamente irán al paro, sino que acabará con una larga época en donde la palabra escrita en papel era en la que se basaba, no sólo la información y la comunicación, sino la cultura en general.
Por Alejandro de Antonio, director de Estudio de Comunicación España.
