A medida que el marketing de influencia se ha vuelto más convencional, muchos especialistas en marketing se están inclinando por seleccionar figuras de Internet, qué si bien cuentan con un número menor de seguidores, estos definitivamente son más dedicados y efectivos para llegar a nuevas audiencias en las redes sociales.A este segmento se le denomina el micro influencer (MI), al que se le define como alguien que tiene una audiencia dentro del rango de entre dos mil y hasta 100 mil seguidores en un canal de redes sociales en particular, y que generalmente su contenido está enfocado por una pasión, un tema o un nicho de mercado. Una importante característica que está llamando la atención de los MI, es que sus seguidores son fácilmente verificables, es decir, que son reales y que si interactúan. Eso se debe a que sus seguidores confían en su criterio, lo cual les otorga una gran capacidad para convencer, para tener una respuesta rápida y efectiva.
El marketing de influencia es un canal relativamente nuevo, y las organizaciones que no están preparadas para la costosa prueba-error (un post puede llegar a costar en promedio 30 mil pesos) están buscando más información antes de decidir participar. Una encuesta de Uproar PR encontró que el 71 por ciento de los consumidores prefieren los MI, y dos tercios de ellos afirman que realizaron compras en función de sus publicaciones, siendo el motivo el principal motivo que los alentó los intereses compartidos.