El inbound marketing es una estrategia de marketing actual y novedosa que consiste básicamente en la creación de contenido. Su principal reto es acercarse al público objetivo de una forma muy sutil y amigable huyendo de la implantación de acciones directas y agresivas de venta de productos propias de la publicidad tradicional. En definitiva, recurrir a la puesta en práctica de acciones amables para llegar al consumidor de una forma lo más cercana y natural posible.
La principal herramienta de esta técnica es la creación de contenido valioso y experiencias hechas a medida para el público al que se dirige, de tal forma, que sea él mismo el que impacte con la acción y no al revés, por lo que generar conexiones útiles con el cliente en la resolución de problemas reales, sería el fin último de esta estrategia.
En el caso de los eventos, su aplicación se realiza antes, durante y después del mismo y el mix que conforma con ellos resulta altamente eficaz. Por ejemplo, antes del acontecimiento se puede generar expectación con la publicación de teaser con el programa, o con la difusión de videos de influencers que se presentan como participantes del acto. El fin último es captar el público adecuado a través de la publicación de contenido de valor que posicione a la organizadora como referente en un tema de interés para él.
Mientras ocurre el evento recurrir a la publicación de hashtag para la generación de opiniones en la red o la realización de talleres paralelos relacionados con el tema, son dos ejemplos de acciones que permiten suscitar el deseo de establecer una relación duradera con la marca. En este caso, se trata de vender más una solución que un producto, es decir, un valor añadido que la empresa ofrece con la asistencia al acto.
Y, después del evento, resulta de vital importancia conocer la opinión del asistente. Para ello, acciones como el envío de encuestas de satisfacción no sólo ayudan al organizador a conocer el resultado conseguido sino, además, a saber qué mejorar o cambiar para próximas ediciones. El fin último es que el invitado descubra que, con el evento, ha construido una relación con la marca difícil de romper a partir de ahora.
Los efectos de estas acciones propias del inbound marketing benefician a los eventos corporativos de igual forma que ellos sirven para nutrir y alimentar esa estrategia aportando contenido y leads (contactos) a la marca. Todas estas herramientas ayudan a que el acontecimiento se convierta en algo fundamental para el público y que éste sienta que, lo que todo event planner desea, necesite volver a vivirlo cuanto antes.
Eva Fresnillo, directora de Estudio de Comunicación
