Quienes siguen las noticias que se producen en el ámbito de la comunicación y del uso de la Web 2.0 como herramienta para transmitir mensajes corporativos, institucionales o comerciales, seguramente conocen el último escandalazo en materia de prácticas mafiosas respecto los medios sociales: el intento de una importante Red de desprestigiar a una más importante empresa tecnológica utilizando a una muy internacional (¿e importante?) agencia de “comunicación”. Y luego explico porqué pongo comunicación entre comillas.
Los detalles, para quien no los conozca, se pueden ver en este enlace con ABC, pero resumo evitando nombres propios, por si la fuente de la noticia (The Daily Beast) se ha equivocado y hace que yo me convierta en culpable de lo que quiero afear: un bloguero de EE. UU. destapó que la internacional agencia se puso en contacto con él y otros Medios y diarios americanos para que filtrara historias y bulos sobre la compañía tecnológica. La agencia no lo hizo por propia iniciativa, claro, sino por encargo de la red social.
Me toca ahora explicar lo de las comillas que decía antes: es que lo que acabo de referir, NO ES COMUNICACIÓN. Es práctica mafiosa, ya digo, sin más. No sé cómo están contempladas en las leyes de EE. UU. la calumnia y la difamación, pero si éstas son delito, la Red los ha cometido, por supuesto, pero también la agencia como brazo ejecutor.
¿Cómo es posible que una empresa de prestigio, de las autocatalogadas como “líder” en Comunicación y RR. PP. (tiene sucursal en España, por cierto), acepte utilizar sus herramientas profesionales y sus contactos con los Medios en meterse hasta las orejas en eso que está pensado el lector y yo no quiero escribir? ¿Por dinero? ¿Por despecho hacia la víctima?…
Confío, y lo siento por la buena gente que seguramente hay en el equipo de esa multinacional, en que tanto la justicia como el mercado castiguen duramente a quien ha defraudado a la profesión y, lo que es peor, ha causado un daño irreparable en la imagen de todos los que nos dedicamos a este oficio con responsabilidad y poniendo lo mejor de nosotros mismos.