Conócete a ti mismo. Este célebre aforismo griego inscrito en el templo de Apolo en Delfos y atribuido a múltiples filósofos de la antigüedad es la base para ahondar en el preocupante abandono de la reflexión que, al parecer, se está produciendo en las sociedades modernas.
En este sentido, la profesora del prestigioso MIT (Instituto Tecnológico de Massachusetts), Sherry Turkle, acaba de publicar en España su libro: ‘En defensa de la conversación’ (Ático de los Libros) cuyo título no deja lugar a la duda.
Para esta psicóloga estadounidense la gente tiene miedo de pasar tiempo a solas, lo que, en su opinión, evita que tengamos espacio suficiente para reflexionar sobre los asuntos que nos conciernen. El problema es que la capacidad para pasar tiempo con uno mismo es un requisito para luego poder entablar relaciones con los demás.
En una entrevista publicada recientemente por el diario El Mundo, Turkle insiste en que la carencia de estímulos externos que conlleva la soledad nos resulta, literalmente, “insoportable”. De hecho, asegura que una cuarta parte de los adolescentes se conecta a un dispositivo electrónico durante los cinco primeros minutos al despertar y que, a lo largo del día, envían una media de 100 mensajes en sus diferentes formatos.
Y la situación parece que empeora con la edad. Así, según diversos estudios, en los últimos 20 años se está observando un declive de la empatía entre los estudiantes universitarios norteamericanos.
Ante este sombrío panorama la investigadora estadounidense propone, entre otros aspectos, desengancharse de los dispositivos móviles, evitando llevarlos a todas partes, incluso a la cama, así como crear espacios sagrados para fomentar la conversación con otras personas, incluyendo a aquellas con las que no estamos de acuerdo. Lo que, sin duda, sirve para enriquecer nuestro punto de vista. Es hora, por tanto, de recuperar el cara a cara y de apostar por la comunicación directa.
Por Fernando Geijo, consultor senior Estudio de Comunicación España.
@fergeijo