El número de empresas que se están planteando y ya utilizan aplicaciones móviles para su comunicación con los empleados está creciendo. Todas parten de la necesidad de llegar con un canal directo sobre todo a aquellos empleados que no realizan su trabajo frente a un PC o un portátil y, sobre todo, canales para generar diálogo y facilitar la interacción entre las personas y entre éstas y la información.
La capacidad de publicar información en tiempo real y llegar a los móviles con una notificación que anuncie una publicación, tal y como ya estamos acostumbrados que haga Facebook o Linkedin, es muy valioso para los equipos de comunicación interna de las empresas. Pero también es valioso para hacer posibles las relaciones entre profesionales –la conexión para el trabajo o para mantener el contacto y la relación que permite saber que formas parte de un grupo-.
Es necesario para las empresas porque en muchos casos -sector de distribución, de retail, industrial,…- no disponemos de canales directos para contactar con ellos que sí disponen en su bolsillo o en su bolso de un dispositivo que les tiene conectados al mundo…
Unas personas cuyo compromiso necesitamos, tanto por su aportación al negocio –ventas y cumplimiento de la promesa de marca ante los clientes – como por su capacidad como co-creadores y portavoces de la reputación. Solo tenemos que pensar que estas personas tienen un entorno personal que les demanda información y opinión tanto sobre la empresa como sobre sus productos, demandas a la que responden como pueden/quieren, con lo que saben y con la imagen que quieren trasladar.
Avanzar hacia la “movilidad” no es tarea fácil. En gran medida por las dificultades técnicas –los sistemas de información de las empresas no siempre están preparados para una conexión desde una App manteniendo los niveles de seguridad y permitiendo a la vez una navegación “amigable”-. Pero como siempre, cuando hablamos de comunicación con los empleados y entre ellos, las dificultades son fundamentalmente culturales: involucrar a las personas y hacerles que se sientan tan cómodas con la App de su empresa como con cualquiera de las que ellos mismos se descargan. Uno de los retos es sin duda la competencia con otras aplicaciones –que ellos elijen porque se ajustan a sus necesidades e intereses-. A pesar de ello,
- Se descargarán la APP si creen que allí encontrarán contenidos de valor para ellos. Es decir, si encuentran contenidos y funcionalidades que les sean útiles e interesantes y que por esta vía les resulten más cómodos
- Si encuentran un diseño atractivo y una navegación fácil e intuitiva.
- Si nos apoyamos en un plan de contenidos, una estructura de gestión y workflow para maximizar el tráfico generado a la App y lograr alcanzar a la totalidad de la organización.
- Si impulsamos el uso con una campaña de adopción que facilite la descarga de la App por el mayor número de usuarios.
Por Concha Gómez, jefa de Comunicación Interna de Estudio de Comunicación España.