A nadie le gusta hacer algo sin saber por qué lo hace, lo que además suele desembocar en no querer hacerlo. Tanto en la esfera profesional como en la personal hemos evolucionado, y somos más críticos. No compramos un discurso o un producto sólo porque alguien lo sugiera, y mucho menos si es impuesto.
La comunicación interna tiene por objetivo conseguir la participación de empleados y directivos en la cultura empresarial, y para ello, no es nada nuevo, es necesario asimilar qué se hace dentro de la compañía. Lo mismo sucede con la comunicación externa, ya que hemos aprendido a distinguir entre la amplia oferta de productos, ideas, eslóganes, culturas…
La transmisión del mensaje “compra”, debe pasar por explicar por qué se estimó necesario crear ese producto, para que el consumidor llegue a entender por qué lo debería comprar. Definir la razón de su existencia suele convertirse en el valor añadido del producto.
Coca-Cola lo sabe bien, tal y como señala José Cantera, especialista en marketing experiencial y de contenidos: “Coca-Cola sabe qué hace, y cómo lo hace, pero sobre todo, por qué lo hace”.
Es una empresa que comunica de dentro a fuera y lo ha vuelto a demostrar con su campaña de comunicación ¿Y si nos levantamos? en la que plantan cara al sedentarismo y al sobrepeso. Promoviendo un estilo de vida saludable mediante la práctica de actividad física, promocionan una gama de bebidas sin calorías para todos sus productos.
Coca-Cola apuesta por una idea, la de comunicar para concienciar y provocar un cambio en los hábitos de la sociedad, aunque evidentemente el fin sea también comercial. Ahí radica la diferencia, algunas organizaciones inspiran mientras otras aspiran pero no lo consiguen.
Los seguidores de una marca lo son porque quieren, eligen serlo, no lo son porque les obliguen, eso sí, hay que darles un porqué.
El marketing, entendido como la estrategia comercial de una empresa, puede centrarse en la promoción de la cultura de la compañía, conduciendo entonces a la creación de un mensaje comunicacional provocador, que motive, rete o inspire mediante el por qué.
Entiende por qué haces las cosas y comunica tus razones, condición sine qua non para cumplir con un objetivo comunicacional.
Por Elisa Carreras, consultora. España.
Hola Elisa,
Muy interesante, efectivamente la comuicación es necesaria y realmente podremos llamarlo comunicación allí dnde aparte de mostrar una marca o un concepto, marca la disposición clara de aportar un valor al usuario o potencial cliente desde el momento cero…como cocacola hace con una alternativa a quienes quieran luchar contra el sobrepeso.
Gracias, un saludo.