En una sociedad como la actual donde la realidad cambia a gran velocidad, quedarse atrás significa desaparecer. Ante este panorama, las empresas deben de actualizarse constantemente.
La tecnología y las redes sociales son un pilar básico que ha quedado más que probado durante este último año. En el ámbito de la comunicación, las empresas necesitan conectar mejor con su audiencia. Para ello han de estar al corriente de nuevas formas de acercarse a su público objetivo y nuevos contenidos adaptados a los distintos canales.
Las marcas deben destacar para hacerse oír por sus públicos y ya no basta con el storytelling, sino que hay que incluir en la estrategia el storydoing y así hacer partícipe a su público. Las empresas han de tener algo que contar para construir y reforzar la identidad, posicionar la marca y conectar con su público.
¿Cómo conecto con un público cada vez más joven y exigente?
Integramos storytelling y storydoing para que el público pase de ser un mero espectador de la historia, a crearla y vivirla formando parte de ella. Las marcas tienen ahora que esforzarse más por ser más creativas y crear escenarios en los que los clientes sean los protagonistas. Así, a través de las experiencias personales, las personas refuerzan el vínculo con la marca. Con esto conseguimos una mayor cercanía y credibilidad de cara a futuros clientes, que tienden a fiarse más de otro cliente que de la propia marca.
Para lograr los objetivos y dar a conocer las iniciativas, las marcas deben apoyarse en los distintos canales y medios de comunicación. El público ya no es un receptor pasivo, sino que, como protagonista, se convierte en activo e interactúa y es por eso que hay que intentar conocerlo a la perfección. Los clientes comparten sus experiencias a través de redes sociales, reseñas u opiniones en internet que aumentarán el alcance de la acción y el engagement del público.
Las marcas, en concreto sus departamentos de comunicación, creatividad y marketing no deberían relajarse, han de estar actualizadas porque la falta de actividad y de adaptación a los nuevos canales puede conllevar caer en el olvido.
Por Inés Amil, consultora de Estudio de Comunicación.
@InesAmil