El diálogo cotiza al alza
La ironía ha sido siempre una buena herramienta parlamentaria. La agresividad, si se usa bien, también. Pero los ciudadanos parece que han dicho basta a los clásicos.
La ironía ha sido siempre una buena herramienta parlamentaria. La agresividad, si se usa bien, también. Pero los ciudadanos parece que han dicho basta a los clásicos.
Estoy en el Palacio de la Cortes asistiendo a la sesión de investidura. Por primera vez, esta sesión parece que no será para elegir presidente del Gobierno sino para decidir quiénes serán los próximos candidatos a unas posibles elecciones.
La nueva sede de Estudio de Comunicación en Madrid contará con los más avanzados medios tecnológicos para prestar servicios de comunicación on line, con sala auditorio, espacios de formación para portavoces, estudios de radio y TV, plató de fotografía…
Releyendo un libro editado por la Asociación de la Prensa de Cádiz y la APM, dedicado a Ryszard Kapuscinski y titulado «los cinco sentidos del periodista».
AB Estudio de Comunicación ha recibido el reconocimiento de “Agencia de Relaciones Públicas del Año”, otorgado por el Grupo Creativa, editor desde 1992 de una de las revistas más reconocidas en el ámbito de la comunicación.
Barcelona acoge estos días el Mobile World Congres. Una cita en la que se encuentran profesionales de todo el mundo para conocer los últimos avances en comunicaciones móviles y debatir sobre lo que nos espera en el futuro.
La actriz española Clara Lago, famosa en España por su papel protagonista en “Ocho apellidos vascos” y “Ocho apellidos catalanes”, ha escrito un artículo en el diario El País a raíz de los premios Goya y de los ataques que ha sufrido en redes sociales su pareja, Dani Rovira, presentador de la gala de los premios.
Gerardo Miguel escribe en Top Comunicación sobre “La personalización del mensaje como tendencia en Comunicación” y reseña la teoría del periodista Jeff Jarvis sobre la desaparición de los Medios masivos en favor de la comunicación dirigida a colectivos concretos.
Los responsables de comunicación no hemos conseguido que los directivos se involucren personalmente en las redes sociales.