La Comunicación Interna de compañías e instituciones llegó a nuestro sistema empresarial hace ya tiempo y vino no sólo para quedarse, sino que arraigó, se desarrolló e implementó con fuerza una vez acreditada su efectividad como herramienta de cohesión de la plantilla y una palanca al servicio de la gestión. Hoy ya no basta con que los empleados estén informados y compartan unos valores comunes. El reto ahora es conseguir que su comportamiento incremente la reputación y contribuya al éxito de la empresa, que es en definitiva el éxito de todos.
La sensibilidad de algunos directivos a la hora de comprender que estimular el compromiso de los profesionales exige acercarse a ellos, escucharlos y dialogar ha sido crucial y la clave del éxito de la Comunicación Interna. Hemos avanzado y mucho en la información con la plantilla y así lo recoge la obra “Empleados comprometidos, empresas eficaces” escrita desde la práctica por varios profesionales del equipo de Estudio de Comunicación de diferentes países que hemos acompañado a nuestros clientes en momentos de crisis, en situaciones de crecimiento, en sus procesos de internacionalización, de fusiones de diferentes organizaciones y hemos aprendido y adquirido una experiencia que ahora compartimos.
Desde Estudio de Comunicación hemos adelantado el capítulo de crisis de este libro, “Empleados comprometidos, empresas eficaces”, en unos días de extraordinaria importancia social y empresarial, sumidos como estamos, en fechas de enorme preocupación por la pandemia del coronavirus, que ha obligado a nuestras empresas, más que nunca, a un esfuerzo de comunicación extraordinario para mantener abiertos los canales de comunicación e interacción con sus empleados, muchos de ellos físicamente alejados de sus puestos de trabajo habituales, y poder mantener así el pulso y desarrollo de la actividad. Un momento excepcional al que deseamos contribuir, más que nunca también, con nuestras ideas en materia de comunicación interna empresarial.
Por Santiago Castaño, asociado en Estudio de Comunicación.