"Gracias por el detalle"
Lo escrito en el titular es una de esas frases habituales que suelen decirse cuando uno recibe un obsequio, obviamente dirigida a quien lo hace. Es un reconocimiento inmediato del agrado que nos produce eso que nos dicen.
Lo escrito en el titular es una de esas frases habituales que suelen decirse cuando uno recibe un obsequio, obviamente dirigida a quien lo hace. Es un reconocimiento inmediato del agrado que nos produce eso que nos dicen.
Lo escrito en el titular es una de esas frases habituales que suelen decirse cuando uno recibe un obsequio, obviamente dirigida a quien lo hace. Es un reconocimiento inmediato del agrado que nos produce eso que nos dicen.
“Besadme el culo”. Esa fue la guinda de las torpezas y exabruptos con las que finalizaba el pasado 1 de agosto la gira internacional del candidato republicano a la Casa Blanca, Mitt Romney y que le han granjeado enemistades.
La verdad es que empezar el primer día de trabajo después del veranito con noticias como la publicada por la Asociación Española de Editores de Diarios Españoles (AEDE) no es que sea lo que más me guste. Pero que la publicidad de los suplementos dominicales de los periódicos españoles haya caído un 30% .
Podemos adjudicarle muchas etiquetas a la red de microblogging: vía de información, de reflexión, de compartir sensaciones o planes… Hasta hay quien ha encontrado la fórmula para filosofar en 160 caracteres -¡o menos!-.
Verbo, añado, en dos de sus acepciones: sonido que expresa una idea y parte de la gramática “que puede tener variación de persona, número, tiempo, modo y aspecto”. La reflexión nos la sugiere Alex Grijelmo.
El Twitter de Banca Cívica, @BancaCivica, dijo adiós a sus seguidores el 3 de agosto. No se despidió a la francesa, nos avisó con antelación y nos dejó un sustituto, @laCaixaResponde, que le da el relevo tras la integración de ambos bancos.
España es noticia en los medios internacionales. ¿Por la prima de riego? No. ¿Por los EREs falsos? No. ¿Por la partida libertaria que recorre Andalucía? Tampoco. ¿Por el récord del turismo? Ni mucho menos.
Alguno de los muchos indignados por la marcha de las cuentas públicas ha abierto una cuenta en Twitter cuyo fin es contar a sus seguidores en qué se gasta -mejor: en qué despilfarra- el dinero público.
Lo que para la inmensa mayoría es la resaca de los juegos olímpicos, para un selecto grupo de deportistas constituye el pistoletazo de salida de su verdadera carrera personal en la que quien gana se lleva la plata, o sea la pasta, el vil parné.